
La competición europea vuelve tras los compromisos internacionales y con ello la Champions League. En la primera parte de la jornada 3, disputada ayer martes se jugaron ocho partidos frenéticos, que a priori resultaban ser “predecible”, no fueron ni mucho menos aburridos.
Salvando el partido del Barça contra el Ajax de Amsterdam, el cual todo los pronósticos auguraban una victoria culé, todos los partidos han tenido sorpresas, ya sean por resultados anómalos o festines de cara a puerta.

El partido de la jornada lo marcaba el Porto – Athletic. A los leones solo les valía ganar para tener opciones de superar una fase de grupos que se ha visto truncadas. Comenzaba dando el golpe el club portugués, con un gol de Herrera en el minuto 45, de esos que se les llama el ‘gol psicológico’. Tras el descanso Valverde tuvo que darle salida al juego por mediación de Beñat, quien materializó un pase al canterano Guillermo Fernández que acababa en las redes del equipo luso. El Athletic dominaba el juego, pero no llegaba confiado de cara a puerta. Ya en el minuto 75, Ricardo Quaresma, que había saltado al campo minutos antes, culminaba una jugada personal que terminaba con las esperanzas de los vascos. El conjunto rojiblanco deberá ganar lo que le queda, para, por lo menos, conseguir plaza en Europa League.

El resto de la jornada se resumió en goles, tanto Chelsea, que recaudó 6 tantos ante un flojo Maribor, como Bayern, que derrumbó el Olímpico de Roma con 7 cañonazos, tuvieron victorias muy fáciles. A esta abundancia anotadora se sumó el Shakhtar Donestk enchufando 7 al BATE Borisov y los 7 goles que se dejaron ver en el Schalke 04 4-3 Sporting de Lisboa.

La gesta se dio forma por parte del CSKA de Moscú quién logró un importante punto ante el Manchester City, y así se vuelve a reenganchar a la puja por los puestos nobles en el grupo E.
