
La Ponferradina demostró este domingo que si se encuentra luchando por los Play-Offs es gracias al fortín montado en el Toralín, ya que sus resultados como visitante no se definirían especialmente como brillantes, perdiendo los tres puntos, esta vez, en Miranda del Ebro.
Se medía ante el Mirandes, que cosechaba únicamente 4 puntos de los últimos 24 posibles, en un encuentro previsiblemente disputado, y que así fue, en la totalidad de los 90 minutos. En la primera parte, aún sin varias ocasiones de gol claras, se pudo ver un gran juego colectivo por parte de los dos clubs, con un gran Sobrino y con el regreso a casa de Pablo Infante, recibido en su mayoría por aplausos, acallando algunos pitidos de gente que aún no perdonó que les abandonara al final de la temporada pasada.
Sin embargo, fue al comienzo de la segunda parte cuando Urko Vera, ex de la Ponfe, remató un gran centro de Emilio poniendo el 1-0 en el marcador. De esta forma obligó a los del Bierzo a arriesgar más en su juego, logrando el empate en el minuto 60 gracias a un buen disparo desde fuera del área de Andy.
Así continuó lo que restaba de encuentro, con ataques continuos de los dos equipos sin perder mucho tiempo en el medio del campo ni en la elaboración de jugadas, con posesiones cortas y disparos rápidos, hasta que Urko Vera por segunda vez en el día, al filo del minuto 90, se elevaba entre la defensa y ponía fin a la mala racha del Mirandes.
Con esto la Ponferradina se posiciona detrás del Zaragoza a tan solo un punto, dejando con la miel en los labios el ansiado sexto puesto que tanto les cuesta afianzar y con un mal sabor de boca al ver que solo se ha ganado 3 partidos como visitante en lo que va de temporada.